domingo, 25 de mayo de 2014

Objetivo

Dar a conocer el trabajo realizado en conjunto con la comunidad perteneciente a "Patios de la Estación", así como mostrar los resultados obtenidos al aplicar el Ilusionismo social como modelo de intervención-acción-participativa (IAP).

Antecedentes Historicos

La idea principal en cuanto al emplazamiento del ferrocarril en el estado de Morelos, era la
creación del Ferrocarril Interocéanico que, mediante nodos en las principales poblaciones,
pudiera facilitar el desplazamiento de las mercancías, tanto de región en región como con los
principales puertos de ambas costas al centro del país, es decir Veracruz y Acapulco. El
proyecto había sido planteado desde 1878, sin embargo, no fue hasta 1890, que el gobierno le otorgó la concesión de dicho proyecto a la compañía estadounidense The Colorado México Investment, que bajo el nombre Ferrocarril México- Cuernavaca y Pacífico, desarrollaría el tendido de vías comunicando Ciudad de México- Cuernavaca- Puente de Ixtla- Acapulco (1890), bajo el mando del Ingeniero Herman Strum (Vázquez, 2003: 50).
La ciudad de Cuernavaca, que hasta entonces había sido considerada de mediano orden aún dentro del Estado de Morelos, adquirió un papel principal dentro del desarrollo económico de la entidad, convirtiéndose en el centro económico-político y administrativo de la región, haciendo uso beneficiario de su cercanía con la capital del país y de la existencia de vías de comunicación como caminos carreteros y rústicos. La estación del ferrocarril fue inaugurada el 11 de diciembre de 1897 por el presidente Porfirio Díaz y el gobernador Manuel Alarcón.
El estallido de la Revolución Mexicana de 1910 trajo consigo grandes cambios dentro de la estructura socio-económica de Morelos, el desgastado modelo hacendario se colapsó ante la insurrección zapatista que reclamaba el reparto justo de tierras y la expropiación de latifundios y bienes hacendarios. En 1911 las fuerzas zapatistas tomaron el control de la ciudad de Cuautla y se desplazaron a Cuernavaca para tomar el control de 500 Km de las rutas férreas hacia la capital y hacia el sur del país.
El 13 de noviembre de 1995, durante el gobierno de Ernesto Zedillo (1994 - 2000) se hicieron públicos los lineamientos generales para la apertura a la inversión del sistema ferroviario mexicano, aunque ya se habían concesionado algunas líneas desde 1994. A partir de entonces se otorgaron concesiones por 50 años a cada una de las empresas privadas, cerrando Ferrocarriles Nacionales de México sus operaciones definitivamente en 1999. Con fecha 4 de junio de 2001, el Diario Oficial de la Federación publicó el decreto mediante el cual Vicente Fox Quesada extinguió el organismo público descentralizado conocido como Ferrocarriles Nacionales de México (Ferronales). El 29 de agosto del mismo año, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), cuyo titular era Pedro Cerisola, eligió al Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras) como la institución responsable del proceso de liquidación.
En el caso de la vía México-Cuernavaca-Balsas, el último trayecto (Cuernavaca-Balsas) fue cancelado en 1987, a partir de lo cual se comenzaron a ocupar informalmente los patios de la estación, que, al día de hoy constituyen un total de 1088 predios, en una superficie aproximada de 20 hectáreas y donde viven en condiciones precarias cerca de 10 mil personas. Actualmente esta zona es considerada por el gobierno municipal como “el asentamiento humano irregular más grande y antiguo de la ciudad de Cuernavaca” (Boletín Ayuntamiento de Cuernavaca No. 509, 2011).

Estructura

El edificio de la Estación está conformado por dos cuerpos: uno de un nivel y otro de dos. Las características formales de la estación son particulares y no corresponden a la tipología que se desarrollaba en la ciudad de Cuernavaca, sino a la estética de las estaciones inglesas de la época.



Cuenta con un gran vestíbulo distribuidor, una zona administrativa, una zona de servicios: locales que correspondían al restaurante, cocina, tienda; y la zona del primer nivel que fue destinada para hotel.
Los muros son de tabique rojo extruído, recubiertos con piedra ígnea al exterior, los entrepisos estaban solucionados mediante un sistema de viguería de madera y las cubiertas y aleros están resueltos en base a armaduras de madera con lámina acanalada de zinc.


Principales problematicas

  • La falta de interés para darle un uso al inmueble, conllevó a la subutilización de la Estación y la hizo foco del vandalismo.

  •  La colonia no cuenta con los servicios básicos (no tiene desazolve de aguas pluviales, propiciando la inundación del conjunto y de la colonia; tampoco cuenta con un servicio regularizado de electricidad, ni con calles pavimentadas, el servicio de recolección de desechos sólidos pasa una ves por semana, propiciando el que las personas opten por tirar los desechos en la calle dándole un aspecto poco higiénico.)

  • Perdida de espacios culturales y de convivencia (La estación, los pósitos de agua).




Historias orales

El propósito principal de estas Historias, fue conocer la historia de la estación desde la perspectiva de sus habitantes, así como tener un acercamiento mas humanista hacia la problemática que se vive en su día a día.
También nos permitió conocer las propuestas que los habitantes tienen, con el propósito de mejorar su calidad de vida, así como cambiar la imagen que se tiene del lugar en el que habitan.



Clavos de la Estación

La actividad permitió la convivencia con los antiguos ferrocarrileros que aun habitan en los Patios de la Estación, la actividad consistió en recolectar piezas que pertenecen a la estructura de toda una vía ferroviaria los claves de los andenes, placas base que se ubicaban debajo de los durmientes, etc. y crear con ellos una pequeña exposición, en donde los antiguos ferrocarrileros nos compartirán sus experiencias acerca de como era la vida en el ferrocarril.